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Cómo la falta de luz solar mató a este niño del Renacimiento
Una autopsia virtual de los restos momificados de un niño enterrado en una cripta familiar en Austria revela que este último murió por falta de luz solar que provocó importantes deficiencias de vitamina D. Los detalles del estudio se publican en la revista. Fronteras en Medicina.
El examen antropológico y paleopatológico de restos humanos de poblaciones pasadas proporciona cada vez más información sobre las condiciones de vida, enfermedades y otras causas de muerte en poblaciones históricas. Sin embargo, todavía hay una falta de información sobre los bebés. Esto se debe principalmente al hecho de que la preservación de los restos humanos infantiles a menudo se ve limitada debido a su pequeño tamaño y la mayor fragilidad de los biomateriales. De hecho, los libros de texto estándar de antropología física generalmente hablan de una mera “deficiencia infantil” en la mayoría de los contextos históricos, lo que indica una “pérdida” de material y datos resultantes.
Si bien los tejidos blandos y los huesos de los bebés pueden perecer muy rápidamente en los entierros humanos enterrados en el suelo, el hecho de que los cuerpos se hayan sometido a una momificación artificial o espontánea en condiciones de almacenamiento protegidas, como en criptas, promueve la conservación. Estos raros descubrimientos proporcionan una visión única de la vida de los niños de las poblaciones antiguas. Este nuevo estudio es un ejemplo.
Un niño muy deficiente en vitamina D
Un equipo dirigido por Andreas Nerlich de la Clínica Universitaria de Munich describe los resultados de un estudio multidisciplinario de una momia infantil de la Alta Austria. Los estudios macroscópico-antropológicos, radiológicos (escaneo de cuerpo completo), histológicos (tejido de piel) e isotópicos de radiocarbono nos indican que se trata de un niño de sexo masculino de 10 a 18 meses de edad al momento de su muerte. Hijo mayor de un Conde de Starhemberg (ataúd guardado en la cripta familiar), el joven habría vivido durante el Renacimiento (entre los siglos XIV y XVII).
A pesar de su educación privilegiada, los investigadores concluyeron que padecía una deficiencia nutricional extrema.

De hecho, los escaneos han resaltado importantes deformidades de las costillas, sugiriendo un caso de raquitismo. Esta enfermedad afecta el desarrollo del esqueleto infantil debido a la deficiencia de vitamina D. El diagnóstico diferencial es la deficiencia de vitamina C (escorbuto). También es posible que las dos condiciones se superpongan. Los restos de tejido pulmonar con adherencia pleural del pulmón derecho también indican una neumonía potencialmente mortaluna enfermedad con mayor prevalencia en lactantes con deficiencia de vitamina D.
Los investigadores también notaron tejido adiposo subcutáneo significativamente agrandado (grosor superior a 1 cm en el ombligo y los muslos) y pliegues longitudinales en la piel. En otras palabras, los tejidos blandos restantes del niño mostraron que él también estaba Exceso de peso cuando murió, eliminando la posibilidad de que estuviera desnutrido.
Así, para los autores, la combinación de obesidad y un grave déficit vitamínico sólo puede explicarse por una Ausencia casi total de exposición solar.
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